El método Martingale
El método Martingale es una estrategia de apuestas que se considera como negativa progresiva. Es decir, se empieza apostando pequeñas cantidades y en caso de pérdida, se dobla la apuesta sucesivamente hasta que el ciclo de pérdidas se detiene y se empieza a ganar. Este método sólo puede aplicarse a las probabilidades superiores a 2,0.
El inconveniente de este método es la rapidez con la que aumenta el importe de la apuesta. Por ejemplo, si empiezas con 2 euros, tendrías que apostar 64 euros si pierdes las cinco primeras apuestas. La diferencia con otros métodos de apuesta clásicos es que este tipo de apuesta no aumenta la posibilidad de ganar.
Es un simple cálculo matemático, al alcance sólo de los que tienen un gran bolsillo y una cartera que no deja margen de preocupación. Si, por ejemplo, está en su décima apuesta negativa con una apuesta inicial de 2 euros, en la undécima apuesta, para recuperar el saldo perdido y obtener un beneficio, tendrá que colocar nada menos que ¡2.048 euros! Perder diez apuestas seguidas no es fácil, al contrario...
En resumen, el método Martingale es positivo cuando se aplica en apuestas de corta duración y negativo para un periodo largo. Esto sucede por dos razones: las casas de apuestas establecen límites de apuestas y no es posible apostar dos veces en la mesa de pronósticos, y obviamente tu cartera no es infinita. En este caso, la única ventaja que puedes tener son los bonos que ofrecen las casas de apuestas.
